Si dejáramos de recuperar y reciclar la piel de los animales para valorizarla en cuero, tendríamos un grave problema ambiental.

La fabricación de cuero moderno recicla más de 270 millones de pieles de ganado cada año a escala global, aproximadamente 7,3 millones de toneladas.

Sin la capacidad de la industria del cuero de transformar las pieles, más de 7,3 millones de toneladas de residuo irían a parar a los vertederos, con un enorme impacto ambiental y biológico. No solo colapsaría los vertederos de todo el mundo, sino que crearía un gran problema de emisiones de gases de efecto invernadero, estimado en 6,6 millones de toneladas al año de CO2e.

El cuero es actualmente la mejor manera de reaprovechar las pieles procedentes del consumo de carne en una economía circular. El cuero hace una contribución sostenible a una sociedad que necesita consumir menos, reutilizar más y reciclarlo todo.

Fuente: Leather Naturally